25 de junio de 2014

Mercedes Clase S Coupé 2014

Ya hay precios para el Mercedes Clase S Coupé, que llegará a los concesionarios españoles en septiembre asociado a un motor V8 en las versiones S 500 de 455 CV y S 63 AMG de 585 CV, ambos con tracción total 4Matic y a un precio de partida de 151.500 euros y 203.300 euros, respectivamente.


El Mercedes Clase S Coupé se podrá adquirir a partir del mes de septiembre en España. Así lo ha anunciado la marca alemana, que traerá su modelo de lujo asociado a un motor V8 de 455 y 585 CV.

El primero de ellos es la variante S 500, con un motor de gasolina de 4,7 litros y un par motor de 71,38 mkg. Se vende con tracción permanente 4Matic y su precio de salida es de 151.500 euros.

La segunda variante V8 está bajo el capó del S 63 AMG, firmado por la división deportiva de Mercedes y otorgándole al motor de gasolina una potencia de 585 CV. En este caso, el coste base asciende a 203.300 euros y también incorpora de serie la tracción 4Matic.


Como novedades, este sedán de lujo cuenta con opcionales como el sistema de inclinación activa denominado ‘Magic Body Control’, capaz de mejorar las sensaciones en el paso por curva actuando sobre la carrocería del coche, dotando de mayor confort en la conducción tanto al conductor como a los ocupantes.

También cuenta con sistemas como el ‘Head up-Display’ (información reflejada en el parabrisas), pantalla táctil y detalles de lujo como cristales de ‘Swarovski’ en sus faros, todos ellos extras que elevan el coste del Clase S.

Alfa Romeo Giulietta Quadrifoglio Verde

El trébol verde vuelve a relucir en Alfa Romeo: probamos el Alfa Romeo Giulietta Quadriofglio Verde, el GTI italiano y, además, la versión más rabiosa del pequeño MiTo.

El máximo responsable de Fiat, Sergio Marchione tiene en la recámara miles de millones de inversión y un puñado de nuevos modelos para relanzar Alfa Romeo y, junto con Jeep, convertir su alianza italo americana en un fenómeno mundial.


La jugada del Alfa Romeo 4C les ha salido redonda a los italianos. El deportivo ligero ha dado un bofetón a los responsables de Porsche o Audi, que posiblemente no imaginaban que Alfa fuera capaz de lanzar un coche tan radical. Y es que no hay duda de que la marca italiana quiere que su ‘cuore esportivo’ vuelva a latir con fuerza, y por el momento, lanza dos modelos tope de gama con la denominación Quadrifglio Verde, el mítico trébol reservado a las variantes más deportivas: probamos el Alfa Romeo Giulietta Quadrifoglio Verde y el MiTo QV.

El primero es especialmente cautivador. No tanto porque sus 240 CV, al menos sobre el papel, sean una respuesta contundente al Volkswagen Golf GTI, sino porque comparte mecánica con el 4C y permite, por tanto, acceder a las sensaciones que transmite el deportivo a quienes no se lo pueden permitir o, sencillamente, viajan acompañados y con equipaje: el 4C cuesta 53.990 euros, mientras que por el Giulietta QV hay que desembolsar 30.990 euros.


Su precio, aunque es un chollo si lo comparamos con el del 4C, puede resultar un sueño caro para los alfistas consumados: el QV cuesta 3.500 euros más que un Giulietta de 170 CV.


Pero si hablamos de alfistas, lo cierto es que la marca no deja de lado a los menos pudientes: por eso lanza también la versión más deportiva del Alfa MiTo, que incluso equipa cambio de doble embrague. Así, puedes disfrutar de un 1,4 litros turbo y sus 170 CV con 250 Nm de par. Suficientes para esprintar hasta los 100 km/h en 7,3 segundos y alcanzar 219 km/h. Y todo con un consumo más contenido de 5,7 litros. Además, aunque esta versión no comparte tantos genes con el 4C como el Giulietta, sí que hace alguna concesión: los baquets son de carbono, el mismo material empleado en la construcción del deportivo.


11 de junio de 2014

Cómo evitar averías en el turbo

Una vez que se suman a los modelos Diesel —hoy todos sobrealimentados y que por si solos copan un 70 por ciento del mercado—, los de gasolina, el resultado es que casi 9 de cada 10 coches que hoy se venden llevan turbocompresor. Este elemento mecánico es clave para incrementar el rendimiento de los motores, pero también ese turbo puede dar, con sus averías, muchos quebraderos de cabeza.


El turbo es uno de los periféricos del motor sobre el que, por lo común, más averías recaen. Y si esa es la mala noticia, junto con que su sustitución puede rondar un coste mínimo próximo a los 1.000 euros; la buena es que cuando deja de funcionar adecuadamente puede no conllevar riesgo para otros elementos mecánicos, por mucho que esto no siempre sea así.


Con frecuencia, si el turbo se rompe, simplemente el coche dejará de responder al acelerador con la fuerza con que antes lo hacía. En otros, quizá con menos frecuencia, su avería puede suponer también la de la válvula EGR, catalizador o hasta algunos elementos del escape. En casos extremos, si el turbo se rompe y una parte metálica de éste se suelta, puede acabar dentro del motor y originarle a éste daños.


Entre las causas que con más frecuencia producen esas averías del turbo, éstas son las más habituales:

- Si no llega suficiente aceite al eje del turbo, un elemento que gira a altísimas revoluciones (hasta 200.000 rpm), el desgaste de los materiales acabará en su ruptura. La falta de aceite puede deberse, simplemente, a la obstrucción de latiguillo que lo envía a ese punto de fricción o, por ejemplo, a un malfuncionamiento de la bomba que mueve ese lubricante. También a la contaminación del aceite con agua o combustible. De producirse esta avería, el motor perderá fuerza, hará ruido y se produce abundante humo.

Cuando el aceite alcanza temperaturas muy altas puede producirse la carbonización de ese lubricante en el eje del turbo, por eso es importante seleccionar tanto una viscosidad como un tipo de aceite adecuados. También es posible que, al margen del aceite, lo que falle es la refrigeración del turbo. Puede hacerse con agua, gracias a bombas eléctricas que hacen que el líquido se mantenga en movimiento al parar el motor y, de ese momento, se elimina el riesgo de carbonización del aceite en el eje. 

- Cuando el aceite lleva excesivo tiempo sin sustituirse o es de mala calidad pueden encontrarse impurezas sólidas en él que se depositen en el eje y acaben por dañarlo. Por eso no sólo es importante extremar la calidad del aceite. Otro tanto ocurre con la atención a las sustituciones del filtro correspondiente con la periodicidad necesaria. ¿La solución? Elegir aceites adecuados y cambiarlos cuando toca.

- Puede ocurrir que al solucionar una avería se olvide algún pequeño residuo metálico —virutas, por ejemplo— en el cárter que acabe obstruyendo el latiguillo del aceite. También pueden suponer un problema parte de un sellador o una junta líquida desprendida. Estas impurezas pueden obstruir los latiguillos de alimentación o retorno del turbo. Hay, por tanto, que extremar la atención tras las reparaciones y sustituir siempre el aceite. También puede ocurrir que en la parte del turbo en la que va la turbina de escape entra algún objeto extraño, como el que puede derivarse de una avería o ruptura en la distribución o el interior del motor, el turbo quedará inutilizado.

- Si por la admisión entra arena porque el filtro está roto, una abrazadera suelta o un manguito se ha rajado —piensa, por ejemplo, en un coche de campo, en el que esta situación puede darse con más facilidad que uno que se mueve exclusivamente por carretera—, el turbo puede acabar pagando el pato. También puede desencadenarse esta avería en ambiente muy polvorientos o si hay mucha sal sobre el asfalto. Conviene revisar periódicamente el estado de los filtros de aire y el estado de manguitos y abrazaderas.

- Un exceso de temperatura en el escape puede suponer una deformación o fisuras de la carcasa del turbo. Esa circunstancia puede deberse, por ejemplo, a problemas con la inyección, filtros, escape, intercooler, etc.

- En los turbos de geometría variable (TGV) es posible que se rompan o averíe el mecanismo que orienta el flujo del escape contra la turbina.Estos elementos son comunes entre los motores Diesel y excepcionales entre los de gasolina —sólo el Porsche 911 Turbo tiene uno, pues para soportar las mayores altas temperaturas de los gases de escape de los motores de gasolina, entre 700 y 800ºC, se exige una costosa sofisticación—. De no funcionar adecuadamente se perderá efectividad en el giro del rodete de compresión, si bien le seguirán llegando gases para moverlo.

¿Cómo alargar la vida de mi turbo?


Al margen de poner atención con el tipo de aceite, su nivel y el estado en que se encuentra hay algunas fórmulas para alargar la vida de este elemento vital para nuestro motor al alcance de cualquier conductor.

Una de ellas es estar atento a cualquier posible ruptura de pequeños objetos o piezas que puedan acabar en él; otra, aún más sencilla aunque frecuentemente olvidada, es hacer funcionar al motor en vacío, al ralentí, al menos dos o tres minutos después de solicitar altos regímenes a un motor de manera continua. Esta situación es frecuente, por ejemplo, en viajes por vías rápidas a alta velocidad y si nuestro turbo no dispone de ningún sistema de refrigeración podemos, a la larga, «salvarle la vida» de actuar así, pues evitaremos la carbonización del aceite sobre el eje.

Renault Laguna 2015: llega el cambio

A pesar de que Renault hace tiempo que no da con la clave del éxito en el segmento de las berlinas, no se rinde. Ya tiene preparado el Renault Laguna 2015, que sustituirá a la tercera generación para tratar de dar un golpe de efecto y alcanzar objetivos mucho más ambiciosos...


Para el Renault Laguna 2015, la marca del rombo utilizará la plataforma modular denominada CMF (Common Module Family), concebida junto con sus socios japoneses y coreanos de Nissan y Samsung y que ya ha sido estrenada en el nuevo Nissan Qashqai. Gracias a ella se reducirán considerablemente los costes de producción. Evidentemente a la berlina se sumaría la variante familiar Grand Tour y también se ofrecerá, en las versiones más altas de la gama, el sistema de cuatro ruedas directrices que en su día estrenó el Laguna Coupé. Además, parece cada vez más cerca la llegada de una motorización híbrida en la que Renault tiene puestas muchas esperanzas.


En cuanto a las mecánicas disponibles, apostará por motores completamente nuevos. En el lado de los diésel, el actual 1.5 dCi sería reemplazado por un 1.6 dCi y el 130 CV pasaría a contar con 160 CV gracias a la ayuda de un segundo turbo. Además debería de crearse un nuevo 2.0 dCi con dos niveles de potencia (180 y 200 CV) y un V6. En gasolina dispondrá de bloques de 130 (1.2 TCe) a 180 CV (1.6 TCe) que irán asociados, como los dCi, a cajas de cambio manuales o de doble embrague EDC.

En el interior está previsto que en la cuarta generación del Renault Laguna se mejore tanto la presentación general como el equipamiento. Hoy en día resulta fundamental contar con una pantalla táctil de generosas dimensiones, pero la novedad puede ser que iría situada de forma vertical. Algo así como lo que ya se ha visto en el Tesla S, que pretende recrear la interfaz a la que estamos acostumbrados en los 'smartphone', aunque también se podrá controlar por medio de un mando situado en el túnel de transmisión.

2 de junio de 2014

Audi RS7 Sportback, tecnología punta

El Audi RS7 Sportback se actualiza con la incorporación de leves cambios estéticos y de equipamiento que potencian la exclusividad de esta berlina deportiva. Sigue montando el motor 4.0 TFSI de 560 CV con sistema de desconexión selectiva de cilindros. Estará a la venta en España después del verano.


En el capítulo estético, las nuevas señas de identidad del Audi RS7 Sportback 2014 las encontramos en el rediseño de los faros delanteros, que pasan a adoptar nuevas formas en concordancia con la nueva parrilla. Estos faros ofrecende serie tecnología Led, pudiéndose elegir de forma opcional faros con tecnología Matrix Led. Por su parte, los intermitentes dinámicos son de serie para los grupos ópticos traseros, que también cuentan con un nuevo diseño.


El Audi RS7 Sportback incorpora el conocido propulsor de gasolina 4.0 TFSI biturbo que rinde una potencia de 560 CV y un par motor de 71,38 mkg depar motor entre 1.750 y 5.500 rpm. Combinado con la eficaz tracción integral quattro y un cambio automático Tiptronic de ocho marchas, Audi anuncia para el renovado RS7 Sportback una velocidad punta que puede variar entre los280 y los 305 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos. En términos de consumo y emisiones, se declara un gasto medio de 9,5 l/100 km y un nivel de CO2 que se queda en los 221 g/km.


El interior del Audi RS7 Sportback 2014 sigue conservando esa mezcla inconfundible de elegancia y deportividad, con un habitáculo en el que el negro y los motivos cromados son los protagonistas en el salpicadero y la consola central. El cuadro de instrumentos, los controles para las salidas de ventilación y las levas del cambio en el volante han experimentado un leve rediseño, mientras que el sistema multimedia de información, navegación y entretenimiento MMI Navigation Plus con sistema de pantalla táctil MMI Touch también se han actualizado.